-madre, salgo a jugar a la calle con los
amigos.
-Vale hijo
pero sobre todo no os acerquéis a la arboleda que hoy ya sabes que al anochecer…
(El hijo que
se llamaba Juan cerró la puerta sin dejar terminar de hablar a su madre)
Juan llego a
la plaza y se reunió en la plaza con sus tres amigos según habían quedado.
-Bueno
chicos ya solo nos queda atrapar a un gato para cumplir el encargo del
forastero.-Dijo Juan.
Mario un chico alto y fuerte comentó
-Cierto pero
no debemos acercarnos a la arboleda al anochecer por lo que cuenta la leyenda
sería muy peligroso.
-¿De que
leyenda se trata? He oído a mi madre decir algo así pero no le he hecho caso-
dijo Juan
Mario empezó
a contar
-Tal día
como hoy 6 de Julio pero hace 100 años, una madre se disponía a dar un paseo,
sus tres niños jugaban al escondite corrieron a esconderse pero jamás volvieron al cobijo de la madre.
La madre se volvió loca buscando a sus niños y fue hallada muerta una semana
después en la arboleda. Desde ese día, todos los años vuelve esa misma fecha al
anochecer y se lleva a tres niños al más allá para sustituirlos por sus niños
perdidos.
Nada mas
terminar la leyenda Juan salió corriendo tras un gato ya que era el último del
pedido, sin darse cuenta él y sus tres amigos acabaron en la arboleda al
anochecer.
-¡oh no
chicos! Estamos en la arboleda, salgamos de aquí antes de que anochezca.
Al decir
esas palabras el sol se ocultó tras las montañas cercanas y todo oscureció.
De estos jóvenes nunca se supo nada más, solo se encontraron
sus zapatos